sábado, 6 de diciembre de 2008

Lupita Ferrer y José Bardina en...

Así empezaba las novelas venezolanas de los años setenta. Me acuerdo de dos: “La Zulianita” y “Una muchacha llamada Milagros”. Todas esas historias estaban basadas en Cenicienta, no aportaban absolutamente nada y esa fórmula se ha repetido año tras año hasta la actualidad. Me acuerdo que mis papás tenían una televisión con mueble de madera acabado “piano” en blanco y negro, pero juro que yo la veía a colores. A las cuatro de la tarde comenzaban las novelas, que en otros lados les dicen “comedias”, aunque sean unos dramones infernales. Pero las novelas venezolanas marcaron un hito en la televisión mexicana. La Lupita Ferrer, con su carita de “no rompo un plato”, su vocecita tipluda y dulce y sus ojos de vaca enamorada arrebataron el alma de más de alguna fámula, que se veía reflejada en esa vida llena de pesares e incomprensiones por parte de la familia del muchacho, éste último caracterizado por el galán copetón José Bardina. La Zulianita, humilde provinciana llega a casa de su prima, la cual regentea un lugar de no muy buena reputación –para que se den una idea, nomás quítenle el prefijo a la palabreja- y la ingenua niña finalmente acaba enlodada en el arrabal, hasta que entra a trabajar al servicio de la familia Arocha… el resto es historia y ya no se las cuento para que se acuerden… En cuanto a “Una muchacha llamada Milagros” puedo decir que es la novela más completa desde que leí Dostoievski… tiene violaciones, naufragios, locos, hijas desaparecidas y reencontradas, pumas tigrones… En una escena, cuando se casa por fin con el galán, reconoce que él fue el violador de su juventud. Me pregunto cómo lo reconoció, seguro tenía una marca en forma de media luna en salva sea la parte, que sólo los de su familia poseían… Y siempre encomendándose a la virgencita de la Chiquinquirá….Y cómo olvidar la novela para niños “Mundo de Juguete”, ñoñísima, pero no perdíamos capítulo mis hermanos y yo. En fin… estas comedias y los cuentos de hadas son los responsables de que yo ahora ande como ando… queriéndome enlodar en el arrabal.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

YO CREO QUE DEBEMOS GUARDAR RESPETO CON LOS ARTISTAS SI A USTED NO LE GUSTA LUPITA FERRER NO LA INSULTE CON SUS COMENTARIOS QUE EN REALIDAD NO APORTAN NADA BUENO RESERVESELOS PARA USTED. RECUERDE QUE LA DECENCIA NO PELEA CON NADIE.

Medusa dijo...

Le agradezco su comentario, y respeto su opinión.

Anónimo dijo...

Exacto, lo que dice el comentario anterior, no hay porque hacer comentarios ofensivos ud. es libre de que lo guste o no el trabajo de Lupita Ferrer, pero se puede criticar de una forma respetuosa, sin ofender ni insultar, si quiere examinar su trabajo hágalo pero de una manera delicada, por ultimo ella es a una actriz que a muchos nos gusta, tiene su estilo y no se puede negar que sus novelas de los 70 gustaban,y que es de las pocas actrices de entonces que aun sigue vigente
saludos, suerte